(título da coluna original da Folha da Tarde - 1985)

27 janeiro 2010

                  
                                           Conversas com mí general


                                      Periodista extranjero: mi general, sabemos que a la Iglesia Católica no le complace la forma como usted maneja la cuestión de los derechos humanos en el país, dicen que usted manda torturar y matar gente de la oposición, muchas veces pobres ciudadanos que no ofrecen ningún peligro a la seguridad nacional. ?Usted como contesta a estas acusaciones?
                                    General: antes que todo, católico devoto que soy, declaro mis respetos a la Santa Madre Iglesia de Roma. En cuanto a dichas denuncias, mucho me extraña que el señor Obispo Radell prefiera hablar con ustedes, visitantes en nuestro país, en lugar de hacerlo en nuestras largas cenas quincenales aquí en mi humilde casa.
                                  Yo recomendaría al Obispo que cuide mejor de los intereses divinos de sus parroquianos y deje las cosas del Estado, terrenales, a mi cargo. Que no se le olvide tampoco de las muy generosas contribuciones de mi gobierno a su amada Iglesia.
                                  Y una información extra para ustedes, distinguidos periodistas, cazadores de detalles curiosos para sus artículos: a su Digníssima Eminencia le encanta mole con pollo, un muy sabroso platillo mexicano, algo picosito, que él traga con un bueno tinto chileno.

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